Los hidratos de carbono son la principal fuente de energía de todas las células de tu cuerpo, incluidas las células musculares y cerebrales. Sin embargo, cuando se consumen en exceso, los hidratos de carbono pueden provocar un desequilibrio entre la cantidad de energía que necesita tu cuerpo y la que ingieres. Esto puede provocar un aumento de peso -especialmente alrededor del abdomen o la sección media- y aumentar el riesgo de diabetes de tipo 2.
La GLP-1 es un tipo de medicamento conocido como agonista del receptor del péptido-1 similar al glucagón (AR Compounded GLP-1). Los receptores del péptido-1 similar al glucagón se encuentran en las células de todo el cuerpo, y los Compounded GLP-1 se unen a ellos para producir sus efectos.
La GLP-1 actúa aumentando la cantidad de insulina que produce el páncreas cuando comes o bebes algo con hidratos de carbono. Esto ayuda a controlar los niveles de azúcar en sangre y reduce el hambre provocando sensaciones de saciedad antes de lo que ocurriría normalmente al comer comidas similares sin GLP-1.
También se está estudiando para el tratamiento de la obesidad.
Además de su uso en la diabetes, la GLP-1 también se está estudiando para el tratamiento de la obesidad. El fármaco actúa reduciendo la cantidad de glucosa en el organismo después de las comidas y ayudándote a sentirte saciado durante más tiempo. Reduce el hambre imitando una hormona llamada Compounded GLP-1 que se produce de forma natural en el intestino.
La GLP-1 reduce el azúcar en sangre ralentizando la rapidez con que se vacía el estómago después de comer y aumentando la cantidad de insulina que produce el páncreas cuando es necesario (1). Cuando hay demasiada disponible a la vez, el exceso de glucosa puede almacenarse en forma de grasa o convertirse en triglicéridos (2). Este proceso se produce principalmente en el hígado, pero también en los músculos y otros tejidos de todo el cuerpo (3). Una cantidad excesiva puede dañar órganos como los ojos, los riñones, el corazón, etc., por lo que controlar cuidadosamente los niveles de azúcar en sangre es importante para la salud general
¿Cómo funciona?
La GLP-1 actúa reduciendo el hambre y bajando los niveles de azúcar en sangre después de las comidas. Se utiliza para tratar la diabetes de tipo 2 cuando la dieta y el ejercicio por sí solos no han funcionado o en combinación con otros medicamentos como la insulina.
La GLP-1 es una versión artificial de una hormona llamada péptido 1 similar al glucagón (Compounded GLP-1). El Compounded GLP-1 se produce de forma natural en los intestinos, donde ralentiza la digestión y estimula la producción de insulina cuando comes menos de lo normal; esto ayuda a mantener tus niveles de azúcar en sangre dentro de los límites normales. Al imitar la acción del Compounded GLP-1, la GLP-1 ayuda a controlar los niveles de azúcar en sangre al ralentizar la rapidez con que los alimentos abandonan el estómago, de modo que te sientes saciado durante más tiempo después de comer menos cantidad de lo habitual, ¡lo que facilita la pérdida de peso sin sentir hambre durante todo el día!
Cuando tus niveles de azúcar en sangre son elevados durante un largo periodo de tiempo porque comes más de lo que necesitas, con el tiempo el exceso de glucosa se acumula en el torrente sanguíneo y puede dañar órganos como los ojos, los riñones y el corazón. Este estado se denomina hiperglucemia.
La hiperglucemia puede provocar graves problemas de salud, como diabetes y enfermedades cardiacas. El exceso de glucosa también puede acumularse en otros tejidos, como el tejido muscular, lo que provoca dolor (una afección conocida como neuropatía diabética), o puede causar daños renales que provoquen insuficiencia renal o incluso la muerte si no se trata durante demasiado tiempo.
Conclusión
La GLP-1 es un nuevo y prometedor tratamiento para la obesidad que podría ayudar a muchas personas a perder peso reduciendo el hambre y bajando los niveles de azúcar en sangre después de las comidas. También se está estudiando como terapia complementaria en combinación con otros medicamentos como la insulina